¿Cómo hacer la discusión de los resultados?

La discusión de los resultados es un apartado sumamente relevante en tu TFG, TFM o tesis doctoral (TD). Realizarla puede llevarte tiempo, y aún más si no sabes exactamente en qué consiste. Por ello, en este artículo te detallaremos qué es, para qué sirve y cómo elaborar la discusión de los resultados de tu TFG, para que no tengas problemas a futuro. ¡Sigue leyendo hasta el final y quizás encuentres lo que necesitas!

Discusión de los resultados de investigación: ¿por qué es importante?

La discusión de los resultados es una sección de tu proyecto de investigación en la que describirás los datos obtenidos, los contrastarás con estudios previos y destacarás los aspectos novedosos. Si formulaste una hipótesis, deberás argumentar su posterior verificación o rechazo.

Este es uno de los aspectos más importantes de tu investigación, ya que es donde se contrastan e interpretan los resultados, datos e información obtenidos a partir de la experimentación. Puede confundirse con la presentación de los resultados o con la propia conclusión, pero son secciones bastante diferentes. Las secciones de discusión se relacionan directamente con la conclusión de tu investigación y la veracidad de sus fuentes.

La discusión de los resultados puede estructurarse siguiendo el formato IMRyD (I = introducción; M = métodos; R = resultados; D = discusión) establecido por el ANSI (American National Standards Institute). En este esquema, cada apartado se diferencia mediante una pregunta de investigación:

• Introducción: ¿Qué problema se abordó?
• Métodos: ¿Cómo estudiaste el problema?
• Resultados: ¿Cuáles fueron los resultados o qué encontraste?
• Discusión: ¿Qué significado tienen estos resultados?

Gracias a estas preguntas, podrás elaborar sus respectivas respuestas y tener una idea más clara de cómo encauzar la discusión de tus resultados.

Características de la discusión de los resultados

La discusión de los resultados presenta una serie de características específicas, que son:

• Exposición de Datos: Este apartado te permite presentar los datos resultantes de los experimentos y precede a las conclusiones de tu investigación.
• Redacción Científica: Debe redactarse basándose en la literatura científica, caracterizándose por ser coherente, clara, precisa, ordenada, pertinente y concisa.
• Tiempo Verbal: Se redacta en tiempo presente, ya que estos hallazgos ya se consideran evidencia científica. Un ejemplo de redacción podría ser: “Los datos revelan que…”.
• Relaciones y Conexiones: Su objetivo es establecer las relaciones entre lo observado y los resultados finales, conectando los hallazgos con los objetivos planteados, la hipótesis y las teorías utilizadas como marco de referencia.
• Interpretación de Resultados: No busca repetir los resultados, sino interpretarlos y plantear ideas personales para contrastarlas con las de otros autores.
• Argumentación y Explicación: Incluye componentes argumentativos y explicativos, ya que debes indicar cómo los datos obtenidos respaldan la veracidad o falsedad de una hipótesis.
• Consecuencias Técnicas: Permite exponer las consecuencias técnicas relacionadas con tu investigación, como las contradicciones de datos basadas en sus limitaciones.
• Recomendaciones: Sugiere recomendaciones para futuras investigaciones o nuevos estudios.
• Fortalezas del Proyecto: Hace referencia a los puntos fuertes y las principales fortalezas del proyecto de investigación realizado.

Gracias a todo esto, podrás comprender que la discusión de los resultados es un elemento sumamente relevante para la correcta composición de tu trabajo académico.

¿Cómo hacer una discusión?

En la discusión de los resultados, nunca pueden faltar dos aspectos fundamentales: la relación de los hallazgos con investigaciones previas y el significado de los resultados obtenidos. Por ello, te recomendamos seguir esta estructura al elaborarla:

1. Resumen: Debe ser breve y basarse en los resultados más relevantes que hayas obtenido. No obstante, evita entrar en cuestiones demasiado detalladas; este apartado funciona como una primera aproximación.
2. Posibles explicaciones para los resultados obtenidos: Puedes apoyarte en la comparación con otras investigaciones relacionadas. Esto se refiere tanto a resultados contradictorios como a aquellos similares que puedan ayudarte a sustentar una hipótesis. Debes considerar todos los hallazgos relevantes, incluso aquellos que no tengan una explicación inmediata, ya que podrían ser útiles en informes futuros.
3. Juicio personal: Es posible realizar interpretaciones personales sobre la información y contrastarlas con las de otros autores.
4. Problemáticas del proyecto: Comenta las debilidades del estudio y las limitaciones a las que te has enfrentado.
5. Relevancia de los resultados: Verifica que los resultados obtenidos sean significativos dentro del área investigada. En algunas publicaciones, las conclusiones se añaden por separado, mientras que en otras se integran al cierre de la discusión.
6. Agregar conclusiones: Debes incluir todas las ideas derivadas del análisis de resultados y sus comparaciones. Las conclusiones te permitirán respaldar las pruebas presentadas.
7. Recomendar próximas investigaciones: Aconseja futuras líneas de investigación y menciona aspectos que no abordaste pero que consideras merecen ser estudiados.

Ejemplos de preguntas 

A continuación, te proporcionamos algunos ejemplos de preguntas que te ayudarán a iniciar la discusión de tus resultados:

• «¿Cuál es la validez de los resultados?»
• «¿Qué tan efectiva ha demostrado ser la metodología implementada?»
• «¿Hubo limitaciones? Y, de ser así, ¿por qué se presentaron?»
• «¿Los resultados revelados por la hipótesis han sido comprobados satisfactoriamente? ¿Eran logrables y reproducibles?»
• «¿Qué tan favorable era el contexto en el que se produjo la problemática para su solución?»

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