Al momento de elaborar tu TFG, TFM o tesis doctoral, debes tener en cuenta la cantidad y calidad de las fuentes de información, ya sean primarias o secundarias. De este modo, asegurarás que tu trabajo cumpla con los parámetros y el rigor científico que se te exigirán durante su evaluación.

Sigue leyendo este artículo si deseas conocer las diferencias entre fuentes primarias y secundarias, así como el criterio de selección para cada una de ellas. ¡Vamos allá!

Fuentes primarias y secundarias: ¿qué son?

Antes de comenzar a diferenciar entre fuentes primarias y secundarias, es necesario que entiendas qué son las fuentes de información. Estas se definen como herramientas que el investigador utiliza para ampliar el conocimiento en un campo de estudio determinado. Por lo tanto, el objetivo de estos recursos es satisfacer una necesidad de conocimiento.

Asimismo, el propósito de las fuentes de información, ya sean primarias o secundarias, es facilitar la localización y detección de documentos, archivos y artículos que serán de gran utilidad para el ámbito académico en cuestión.

En consecuencia, las fuentes de información pueden proporcionar datos más o menos fiables. Esto influirá directamente en los resultados obtenidos de la investigación. En un mundo hiperconectado, donde la difusión de información es cada vez más masiva gracias a Internet, es necesario saber diferenciar entre la información útil y la que no lo es. Por lo tanto, una de las tareas del investigador será realizar un filtro que permita identificar las fuentes verosímiles y pertinentes.

Teniendo en cuenta que las fuentes de información pueden ser de distintos tipos y aportar datos más o menos verídicos, es posible diferenciar entre fuentes primarias y secundarias.

¿Qué es una fuente primaria y qué es una secundaria?

Ahora que ya conoces qué son las fuentes de información, a continuación, realizaremos una descripción de lo que es una fuente primaria y lo que es una secundaria. Presta atención a los detalles de cada una para comprender mejor sus diferencias.

Fuentes primarias

En primer lugar, las fuentes primarias son aquellas cuya información es original, es decir, que su contenido no ha sido tratado o analizado por un investigador y, por lo tanto, se mantiene intacto.

Asimismo, este tipo de fuentes consiste en la recopilación de datos a través de cuestionarios, entrevistas, encuestas, fotografías, vídeos, entre otros. Sirven para constatar una hipótesis que ya ha sido planteada previamente.

• Tipos de fuentes primarias

Un ejemplo de fuente primaria podría ser el análisis del comportamiento del consumidor ante una nueva bebida que se pretende lanzar al mercado, ya que no existiría información previamente tratada que nos permitiera conocer su conducta. En este caso, sería necesario recurrir, por ejemplo, al uso de encuestas para determinar cómo reacciona una muestra específica a este producto y obtener información suficiente para sustentar las conclusiones alcanzadas.

Al mismo tiempo, la posible publicación del informe sobre los resultados obtenidos podría ser utilizada por otro investigador que desee analizar a los consumidores de bebidas en un mercado, junto con otra información disponible. En este último caso, podríamos decir que el investigador estaría haciendo uso de dichas fuentes.

Fuentes secundarias

Ahora veamos las fuentes secundarias, las cuales amplían los resultados concretos aportados por las fuentes primarias. Es decir, se genera contenido a partir de la extracción de información de un recurso primario. Además, se pueden identificar porque su objetivo principal no es ofrecer información, sino indicar qué recursos pueden proporcionarla.

En términos generales, los documentos secundarios se refieren habitualmente a los primarios.

• Tipos de fuentes secundarias

Entre las fuentes secundarias se incluyen los artículos de revistas, reseñas, biografías, resúmenes de trabajos científicos, reportajes, etc.

Los periodistas suelen desarrollar y elaborar este tipo de fuentes. Esto se debe a que no disponen del tiempo ni de los recursos necesarios para crear una fuente primaria. Por lo tanto, las utilizan como base para elaborar noticias o reportajes.

Al redactar una noticia sobre el posible resultado de las elecciones presidenciales, se recurre a las encuestas previamente elaboradas por una empresa de análisis. Por ello, suele hacerse referencia siempre al estudio original:

Según una encuesta realizada por el Instituto Indrax, el 56 % de los participantes tiene intención de votar al partido X.

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